El suministro oral y las soluciones inyectables son totalmente compatibles en la nutrición bovina y en el aporte de minerales traza.

Sin embargo, estas metodologías de suministro tienen alcances y características distintas, que el médico veterinario y productor deben considerar para una correcta gestión y manejo.

A continuación, profundizamos en las principales diferencias entre ambas y sus particularidades.

Absorción

Las fórmulas inyectables tienen un tiempo de absorción mucho menor en comparación con el suministro oral.

Soluciones inyectables que suplen selenio, zinc, magnesio y cobre, son absorbidas por el animal en un periodo de 8 a 10 horas.

Luego de 24 horas, los minerales se localizan en el hígado y, desde allí, pueden ser almacenados, incorporados en enzimas biológicamente activas y distribuidos por todo el animal para su uso.

Esta ágil suplementación de minerales traza también se traduce en un aumento de las enzimas de la función inmune.

Efectividad frente a agentes antagonistas

El complejo entorno del rumen en el ganado, al igual que antagonistas como el hierro y el azufre, interfieren en la absorción óptima de los minerales traza cuando son suministrados de forma oral.

Dependiendo del mineral, estos agentes antagonistas pueden generar que la absorción sea apenas de entre el 1% y 30%, por lo cual la mayoría de los minerales trazas son excretados en las heces o en la orina.

De esta manera, se hace sumamente lenta y deficiente la reposición mineral durante los acontecimientos críticos del ganado, como la vacunación, por ejemplo.

En cambio, las soluciones inyectables de minerales traza proporcionan una vía mucho más rápida y precisa de suplementación y restauración.

Al evitar el rumen, este tipo de suplementación se absorbe rápidamente y alcanza niveles óptimos en la sangre, en periodos de tan solo 8 a 10 horas, como mencionamos líneas atrás.

Momento de aplicación

Si bien es una forma de suministro mucho más eficiente, las soluciones inyectables están orientadas a suplir déficit o cubrir necesidades especiales de minerales, por lo cual su uso es eventual/estacional.

En tanto, la ingesta oral de minerales básicos debe formar parte de la nutrición diaria del ganado, independientemente de la edad, el entorno y los objetivos de producción.

Veamos algunos procesos críticos en los cuales las soluciones inyectables dan esa protección adicional y agregado de valor nutricional indispensable.

I. Vacunación

Las vacunas son clave para prevenir problemas virales asociadas al complejo respiratorio bovino (CRB), entre otras amenazas a la salud del animal.

La CRB genera altas pérdidas económicas tanto en la industria lechera como en la de la carne. 

Este se produce a raíz de la diarrea viral bovina, el IBR (rinotraqueítis infecciosa bovina), el respiratorio sincitial bovino o el parainfluenza 3, entre otros virus que pueden complicarse por bacterias como mycoplasma bovis y pasteurela multócida.

No obstante, si bien es necesaria, las vacunas afectan de manera negativa el estatus de minerales traza en animales recientemente vacunados.

Afortunadamente, el déficit se puede prevenir o mitigar si se aplican soluciones inyectables de rápida absorción junto al proceso de inmunización.

Incluso, estudios universitarios reflejan que el aporte de soluciones multiminerales durante este proceso genera una respuesta inmune mucho más rápida por parte de las vacunas.

  1. Otras épocas estrés 

Diferentes estudios universitarios y científicos han demostrado ampliamente que el nivel de minerales traza puede disminuir de forma considerable durante los periodos de estrés.

Esto se debe, primordialmente, a que los animales pierden el apetito y en consecuencia no cumplen con la ingesta diaria de alimentos – minerales incluidos – para que su sistema inmune y estado de salud en general estén en los niveles ideales.

Las consecuencias del déficit de minerales van desde una inmunidad deteriorada o severamente deteriorada hasta un estado clínico que comprometa la vida del animal.

Es por ello que la suplementación inyectable de minerales traza es clave en clásicos periodos de estrés, que, además de la inmunización, incluyen:

  • Parto de vacas;
  • Manejo de becerros y novillos cuando son marcados, transportados, destetados o recibidos en centros de engorde.

¡Gracias por acompañarnos hasta aquí! Ahora conoces las principales diferencias entre el suministro oral y las soluciones inyectables de minerales traza.

Los minerales traza son de suma importancia para la inmunidad y se emplean en grandes cantidades cuando el cuerpo está bajo estrés y el sistema inmunológico emplea un mayor esfuerzo.

A medida que se agotan los minerales traza, el sistema inmunológico se vuelve menos eficaz, incrementando la probabilidades de enfermedades.

Por ello, además del suministro oral diario, se requiere una fuente complementaria inyectable, de rápido efecto y mucho más potente, antes o durante los eventos críticos.

Para entender con mayor profundidad la variación del requerimiento de minerales traza en el ganado, ¡te invitamos a hacer clic aquí para leer nuestro post especializado en el tema!